Laminar significa poner varias bandas una encima de la otra y unirlas térmicamente o "pegándolas". La fusión precisa de dos o más telas reduce enormemente los residuos y, por tanto, constituye un enorme potencial de ahorro. En el proceso de laminación, las bandas de baja elasticidad se combinan muy a menudo con bandas de alta elasticidad. Si los productos finales se exponen posteriormente a altas temperaturas (radiación solar) durante su uso (por ejemplo, en un coche), se pueden evitar los problemas de calidad mediante un proceso de fabricación con tensión de banda optimizado y reproducible.
Como parte de nuestro programa de máquinas, también suministramos instalaciones controladas por programa con devanadores y rebobinadores así como acumuladores de rodillos regulados por tensión de banda. Ante un cambio de producto la instalación con todos los parámetros de proceso se prepara automáticamente sin pérdidas de tiempo para el siguiente inicio de producción.